viernes, 15 de febrero de 2013

La Vida Post-veintena (el valor moral de acumular años)

       Si, acertaron. Cómo podrán deducir en base a los expuesto en el título, hace escasos días cumplí 31 abriles (el 9 de Febrero para ser precisos, aclaro por las dudas de que alguien se confunda con la analogía poética de los "abriles"). Y realmente es necesario decirlo: cambiar de década es bravo, más bravo de lo que sospechaba. Los treinta y uno me agarraron inclusive menos preparado para esto que los treinta.

       Hasta hace unos cinco años, sostenía que desde mis dieciocho en adelante no sentía haber cambiado mucho respecto de mi forma de ser y pensar; a pesar de mi trabajo, mi formación académica, mis relaciones de pareja y mis responsabilidades a cuesta no me sentía una persona "grande". Y ciertas ramas de la psicología, que respaldaban la idea de que la adolescencia se estaría estirando hasta los veinticinco años, me daban la derecha en esa cuestión. Después de todo, no por nada soy un exponente de la Generación Y, la que viene a continuación de la Generación X (no, no es chiste).

FLASHBACK. Nadie puede tener ganas de volver para
ser ESTO. Ni por toda la cerveza más fría y las playas
más lindas del mundo.
       Sumamente curioso este hecho de sentirse "como de dieciocho", y contradictorio al mismo tiempo. En especial porque nunca fuí de esas personas que suspiran cuando piensan en sus años adolescentes, tópico que surge de vez en cuando en alguna conversación. Por ejemplo, ¿quién quisiera volver a tener diecisiete años, realmente? tener que pedir plata por cualquier cosa que quieras hacer, pedir permiso para salir, no poder volver a la hora que uno quiera, soportar el aburrimiento del colegio, vivir con tus viejos, etc...Muchos románticos adeptos al axioma que decreta "todo tiempo pasado fue mejor" dirán que son los mejores años de nuestras vidas, pero creo fehacientemente que atravesarlos una vez ya es más que suficiente. Todas esas películas en las que el/la protagonista vuelve mágicamente a ser adolescente nos mienten descarademente! no debe estar ni un poquito bueno...

       En los últimos dos años las cosas empezaron a cambiar un poco respecto de sentirme "de dieciocho", esos pequeños detalles: no importa como este vestido -de oficina/sport/short y ojotas- siempre que voy a comprar algo me dicen "señor" y me tratan de usted empleados que no deben ser ni ocho años menores que yo, también pasé a ser invisible para los tarjeteros de la peatonal cuando anduve por la costa atlántica, amigos un poquito más jóvenes proponen festejar cumpleaños en boliches a partir de las 3 de la mañana y siento que me parten al medio, etc.

       Uno de mis chistes más celebrados por aquellos que tienen la desgracia de conocerme desde hace demasiado tiempo, es el de citar la frase "yo la voy a rockear por siempre viejo, forever...forever...forever" cual Homero Simpson cada vez que se habla respecto de sentirse joven y todo eso; a pesar de que hago el chiste sin la intención de que se tome al pie de la letra, y más de una vez algún que otro despistado que no sabe leer entre lineas lo malinterpreta. Pero me di cuenta que sin la necesidad de "rockearla forever" puedo estar de todas formas conforme con la gracia con la que me van tratando los años, y rockearla a mi manera...

Perdón por la calidad del video ejemplificador, es lo mejor que me pudo dar el Sr.Youtube:


       Y por rockearla a mi manera me refiero a que los años me han dado la posibildad de estar en un lugar de privilegio, desde el cual puedo tomar discernimiento respecto de las cosas más serias y así como las más triviales, tales como saber determinar cuando una película es una remake o está basada en un libro o una novela o es un rejunte de muchas otras películas exitosas en su época, o cuando el nuevo hit es en realidad un cover de otra canción que tiene más de cuarenta años, poder reconocer que la más nueva sensación musical juvenil es en realidad un reciclaje de clichés de íconos musicales previos a 1983, saber si tu jefe te está boludeando o es un garca, o si en realidad todos son así, haber visto enormes futbolistas que la rompieron antes de que Messi y Cristiano dejaran los pañales, que mujer te conviene mantener al lado y en que mujer no deberías malgastar ni un segundo de tu preciado tiempo sin importar que...entre otras cosas.

31 y contando. Me gustaría pensar que los años han sido benevolentes conmigo
...o la gente es muy amable y disimula su desagrado cuando me ve a la cara.
       Dicen que la experiencia es un peine que te regala la vida cuando ya te quedaste pelado, pero a pesar de eso puedo decir que soy una persona feliz de contar con la experiencia que acumulé hasta ahora...y aún más feliz de todavía tener pelo para peinar!


Saludos y hasta la próxima!


4 comentarios:

Kariu dijo...

El tiempo ha sido generoso contigo, muchachito, no morirás a los 27 pero tal vez puedas inmortalizarte al morir a los 33. Para ello deberás hacerlo por una buena causa como salvar a la humanidad...
Felicidades Ale!!! Besote.

Gallego dijo...

Ale, por siempre en la cresta de la ola! y siempre serás el baby face del grupo!

Ale Turdó dijo...

Que bueno que consideren que los años han sido generosos conmigo...es verdad que zafé al "club de los 27", capaz a los 33 puedo hacer algún milagro como convertir el agua en fernet con coca o multiplicar los ambientes de mi casa para agrandarla un poco.

Gracias por pasar!

Ale Turdó dijo...

Gracias Gallego...Cresta de la Ola all the way!