domingo, 24 de febrero de 2013

El Muro de los Lamentos

       Todo usuario promedio de las redes sociales, Facebook en particular, puede notar que a la gente le gusta compartir muchas cosas, como decir fotos de las vacaciones, de sus hijos, sus mascotas, su comida, links a videos graciosos, música, juegos (el que este libre de haber recibido alguna vez una invitación para  jugar al Farmville o Candy Crush que arroje la primera piedra), productos, noticias, posts de algún que otro blog inteligente y profundo que invitan a la reflexión (ejem, ejem), etc, entre tantas otras...uno se va acostumbrando a ser testigo de una extensa y amplia gama de cuestiones que los usuarios consideran de interés para todo aquel que tenga la oportunidad/desgracia de sentarse frente a su monitor o la pantalla de su smartphone.

       "Gustos son gustos..." dice el dicho y cada uno le puede agregar el remate que mejor le suene; no somos quien para emitir un juicio de valor respecto de aquello que la gente decide compartir en las redes...pero hay algunos casos en que no vendría mal tener una aplicación que interpele al usuario, y le haga un par de preguntas de rigor antes que este haga click en el botón de compartir; Preguntas simples como "¿Estás seguro que querés compartir esto?" o algunas que inviten a hacer un revisión tipo "¿Lo viste bien, no?" para después ir elevando la exigencia en caso de ser necesario con ultimatums tales como "¿Que dice esto de vos, realmente te representa o te hace quedar como un siome?" 

TRAINSPOTTING. En versión estampita (¿?).
       En todo esto y mucho más pensé hace unos días cuando en la página de inicio de Facebook ví que alguien compartió la imagen que tienen a su derecha:

       No es mi intención que lo siguiente sea interpretado como una burla o falta de respeto hacia los católicos ni hacia el creyente promedio, lo único que me interesa es resaltar la necesidad en algunos casos de aplicar el principio de "pensar dos veces" antes de compartir imágenes que bien podrían leerse distinto.

       En mi caso por ejemplo, por lo que pude interpretar al ver esta imagen, se desprende una moraleja según la cual no hay que pecar ni siquiera contra uno mismo...porque Dios aparentemente siente el dolor por nosotros; Ok, hasta ahí podríamos decir que no hay objeciones graves. Ahora, si me sigo guiando por la representación, también podría inferir que Dios se bajonea MAL cuando decoramos nuestros hogares con nunchakus, calaveras y similares elementos asociados a la magia negra y el ocultismo. Y si encima hace mucho que no le damos una buena mano de pintura a las paredes, tenemos el tupé de dejar el revolver tirado arriba de la mesa, no limpiamos el cenicero cuando se llena de colillas de pucho y apoyamos nuestra mano engrasada en la puerta para cerrarla en vez de usar el picaporte como las personas civilizadas, ahí si que se arma la gorda con JC...

       Es complejo -por decirlo de forma sutil- todo lo que se puede interpretar de esta imagen en base a lo que muestra, pero es mucho peor lo que podría simbolizar por oposición. Después de verla, tranquilamente podríamos deducir que en una casa bien estas cosas no pasan, porque ahí sí qué lo tratan al niño Dios como corresponde, lo reciben con la mesa limpia y no lo obligan a inyectarse porquerías en el brazo ni nada. Siguiendo esta lógica, aparentemente sólo la gente pobre con problemas de higiene personal comete múltiples pecados y abusa de las  drogas, o al menos eso entendí.

MUGRE+CALAVERAS+VIOLENCIA+ALCOHOL+DROGAS = DIOS BAJONEADO.
Deducción lógica en base a los elementos presentados. 
      No dudo en absoluto de las buenas intenciones de aquella persona que tuvo el desatino de compartir esta imagen, porque seguramente no vió lo mismo que yo ni reparó en ciertas doble lecturas que podría traer aparejadas. Pero me fue de suma utilidad como ejemplo clarificador al momento de desarrollar una idea respecto de que se debería y que no se debería compartir en las redes sociales. 

FAIL. Mejor compartir un corrector tal vez.
       Hoy me la agarré de punto con la imagen de Jesús, nada personal...pero el concepto es igualmente aplicable para todos aquellos que deberían pensarlo dos veces antes de colgar en el muro citas poéticas carentes de sentido para el lector promedio, los que piden "compartí esto"  para salvar a algún niño enfermo en vez de ir a algún hospital personalmente a donar sangre, los que claman por un "me gusta" que ayude a terminar con el hambre mundial en vez participar activamente en alguna ONG, o los que profetizan que Facebook va a dejar de ser gratuito y el consecuente apocalipsis que ello desataría en el planeta tierra tal y como lo conocemos...

Si estás de acuerdo con lo que digo...PEGALO EN TU MURO!


Saludos y hasta la próxima!


viernes, 15 de febrero de 2013

La Vida Post-veintena (el valor moral de acumular años)

       Si, acertaron. Cómo podrán deducir en base a los expuesto en el título, hace escasos días cumplí 31 abriles (el 9 de Febrero para ser precisos, aclaro por las dudas de que alguien se confunda con la analogía poética de los "abriles"). Y realmente es necesario decirlo: cambiar de década es bravo, más bravo de lo que sospechaba. Los treinta y uno me agarraron inclusive menos preparado para esto que los treinta.

       Hasta hace unos cinco años, sostenía que desde mis dieciocho en adelante no sentía haber cambiado mucho respecto de mi forma de ser y pensar; a pesar de mi trabajo, mi formación académica, mis relaciones de pareja y mis responsabilidades a cuesta no me sentía una persona "grande". Y ciertas ramas de la psicología, que respaldaban la idea de que la adolescencia se estaría estirando hasta los veinticinco años, me daban la derecha en esa cuestión. Después de todo, no por nada soy un exponente de la Generación Y, la que viene a continuación de la Generación X (no, no es chiste).

FLASHBACK. Nadie puede tener ganas de volver para
ser ESTO. Ni por toda la cerveza más fría y las playas
más lindas del mundo.
       Sumamente curioso este hecho de sentirse "como de dieciocho", y contradictorio al mismo tiempo. En especial porque nunca fuí de esas personas que suspiran cuando piensan en sus años adolescentes, tópico que surge de vez en cuando en alguna conversación. Por ejemplo, ¿quién quisiera volver a tener diecisiete años, realmente? tener que pedir plata por cualquier cosa que quieras hacer, pedir permiso para salir, no poder volver a la hora que uno quiera, soportar el aburrimiento del colegio, vivir con tus viejos, etc...Muchos románticos adeptos al axioma que decreta "todo tiempo pasado fue mejor" dirán que son los mejores años de nuestras vidas, pero creo fehacientemente que atravesarlos una vez ya es más que suficiente. Todas esas películas en las que el/la protagonista vuelve mágicamente a ser adolescente nos mienten descarademente! no debe estar ni un poquito bueno...

       En los últimos dos años las cosas empezaron a cambiar un poco respecto de sentirme "de dieciocho", esos pequeños detalles: no importa como este vestido -de oficina/sport/short y ojotas- siempre que voy a comprar algo me dicen "señor" y me tratan de usted empleados que no deben ser ni ocho años menores que yo, también pasé a ser invisible para los tarjeteros de la peatonal cuando anduve por la costa atlántica, amigos un poquito más jóvenes proponen festejar cumpleaños en boliches a partir de las 3 de la mañana y siento que me parten al medio, etc.

       Uno de mis chistes más celebrados por aquellos que tienen la desgracia de conocerme desde hace demasiado tiempo, es el de citar la frase "yo la voy a rockear por siempre viejo, forever...forever...forever" cual Homero Simpson cada vez que se habla respecto de sentirse joven y todo eso; a pesar de que hago el chiste sin la intención de que se tome al pie de la letra, y más de una vez algún que otro despistado que no sabe leer entre lineas lo malinterpreta. Pero me di cuenta que sin la necesidad de "rockearla forever" puedo estar de todas formas conforme con la gracia con la que me van tratando los años, y rockearla a mi manera...

Perdón por la calidad del video ejemplificador, es lo mejor que me pudo dar el Sr.Youtube:


       Y por rockearla a mi manera me refiero a que los años me han dado la posibildad de estar en un lugar de privilegio, desde el cual puedo tomar discernimiento respecto de las cosas más serias y así como las más triviales, tales como saber determinar cuando una película es una remake o está basada en un libro o una novela o es un rejunte de muchas otras películas exitosas en su época, o cuando el nuevo hit es en realidad un cover de otra canción que tiene más de cuarenta años, poder reconocer que la más nueva sensación musical juvenil es en realidad un reciclaje de clichés de íconos musicales previos a 1983, saber si tu jefe te está boludeando o es un garca, o si en realidad todos son así, haber visto enormes futbolistas que la rompieron antes de que Messi y Cristiano dejaran los pañales, que mujer te conviene mantener al lado y en que mujer no deberías malgastar ni un segundo de tu preciado tiempo sin importar que...entre otras cosas.

31 y contando. Me gustaría pensar que los años han sido benevolentes conmigo
...o la gente es muy amable y disimula su desagrado cuando me ve a la cara.
       Dicen que la experiencia es un peine que te regala la vida cuando ya te quedaste pelado, pero a pesar de eso puedo decir que soy una persona feliz de contar con la experiencia que acumulé hasta ahora...y aún más feliz de todavía tener pelo para peinar!


Saludos y hasta la próxima!