viernes, 27 de abril de 2012

¡No Quemar Después de Leer!

            Como algo que aparenta ir camino a convertirse en una tradición dentro de este impopular blog, llega ese momento del año en el cual despotrico contra una nota de la sección "Sociedad" del diario Clarín, en la cual otra vez meten miedo, alegando que en un futuro (no muy lejano, como siempre) la gente va a leer cada vez menos y menos...o directamente no va a leer, nunca jamás!


         Y por más que este tipo de notas despierten en mí un poco de toda esa ira que uno lleva encerrada, lista para descargar en aquellos momentos en que cuestiones triviales como esta nos dan la excusa perfecta, en parte la idea que desarrolla el artículo me llega, porque indirectamente me tocó vivirla un poco de cerca en los últimos años.  En charlas casuales con lectores ocasionales de este blog, nunca falta alguna que otra persona que te comenta, muy casualmente al pasar: "che muy bueno el post de los dinosaurios que disparan rayos láser con los ojos... eso sí, un poco largo" (el tema del post expuesto funciona simplemente a modo de ejemplo...jamás escribí sobre dinosaurios con ojos de rayo láser...porque hasta ahora jamás se me había ocurrido!...próximamente?)

        El ejemplo dado nos lleva a plantearnos lo siguiente: ¿Cuánto prentede leer una persona y a qué considera lectura? No tengo nada en contra de Facebook, Twitter e incluso los memes, de hecho soy un asiduo consumidor de todos ellos, más de lo normal...pero de ahí a considerarlos "el futuro de la lectura", no sé...prefiero considerarlos como nuevas formas de comunicación.

       Facebook es una galería bastante egocéntrica en la que todos, reconozcámoslo, ponemos que nos gusta/que no nos gusta, nuestras fotos, nuestra música, curioseamos en que andan los demás, etc; Twitter es una suerte de grafitti 2.0 que permite redactar comentarios jocosos, reflexivos e incluso vivenciales, escribiendo una pared que vence las barreras geográficas; y los memes, en fin, un formato humorístico en clave de "papelito con el dibujo gracioso que hacía tu compañero de banco identificado como el jodón de la clase", sólo que se actualiza y resignifica constantemente según los temas de interés dentro de la cultura web.

       Pero la lectura per se, me gustaría pensar que nunca va a dejar de ser aquella que se hace sobre un texto compuesto con cierta profundidad, que se encarga de utilizar todas y cada una de las palabras que sean necesarias (y no solamente 140 caracteres) para expresar exactamente aquello que se quiere comunicar, con la extensión que dicho desarrollo exija para llegar al punto que se quiere llegar.

       Envidio sanamente y felicito a todos aquellos que hacen de la síntesis una forma de expresión del pensamiento (como por ejemplo @Mic_y_Mouse, a quien recomiendo seguir, entre tantos otros talentosos del universo Twitter) porque requiere de un ingenio y un talento que es propiedad de unos pocos...pero que la prensa especializada no venga a corrernos con que ESTO es el futuro de la lectura:

       
       Me gustaría pensar que formas de escritura como esta, sobre sangre y orcos entre otras cosas, serán consideradas variables dentro de las llamadas "formas de comunicación 2.0" o como prefieran decirle. Porque si esto es verdaderamente el futuro de la lectura, a tomar clases de braile!

Saludos y hasta la próxima!



2 comentarios:

Kariu dijo...

A mi las redes sociales me sirven para leer aún más. Gracias a ellas leo noticias, blogs y libros que me recomiendan.
Muchas veces el periodismo necesita llamar la atención con este tipo de artículos, pero son puras patrañas. Ayer la Feria del Libro estaba intransitable y más allá de la calidad de escritura de algunos de los autores más populares, me deja la sensación de que al menos en Argentina se lee mucho.

Ale Turdó dijo...

Si, totalmente Kari; las redes sociales a mi también me ayudan a leer más y más...pero que no digan que las redes sociales por sí solas representan el futuro de la lectura..tss, que se creen? jajaja!

Gracias por pasar, Saludos!